Five Nights at Freddy´s es una franquicia de videjuegos que surgió en el 2014 y en poco tiempo logró cosechar una importante base de fans en el público adolescente.

A raíz de la popularidad de la propuesta en Hollywood enseguida le dieron luz verde a la adaptación cinematográfica que iba a contar con la dirección de Chris Columbus.

El proyecto en el estudio Warner no avanzó y luego la productora Blumhouse lo retomó con  Emma Tammi, una realizadora que llamó la atención hace unos años en el circuito independiente con el thriller psicológico The Wind.

Su nueva obra probablemente será más valorada por el fandom acérrimo de FNAT que se enganchará con la identificación de las referencias y los guiños al juego.

Para el público general que buscaba entretenerse con una comedia bizarra de terror el panorama está más complicado ya que ese contenido brilla por su ausencia.

Algo que no debería sorprender si tenemos en cuenta que se trata de un producto de Blumhouse.

La obra de Tammi se ve afectada por dos cuestiones específicas.

En primer lugar el film termina asfixiado por la calificación PG-13 que le impide a realizadora divertirse con el concepto de los muñecos asesinos.

 A lo largo del relato hay un par de muertes pero el retrato de esas escenas se presenta de un modo liviano para que los chiquitos de 12 años puedan ver la película en el cine junto a la compañía de un adulto.

Todo el absurdo de la premisa argumental no llega a ser aprovechado a través del humor y la trama se inclina por explorar un drama genérico sobre el trauma que resulta soporífero.

Otro problema de esta producción es que le ganó de mano el estreno de Willy´s Wonderland (2021) que trabajó la misma premisa con un Nicolas Cage fuera de serie.

Todo el contenido de humor bizarro y gore que se podía esperar de una historia de estas  características se trabajó con mayor solidez en ese film que resultó mucho más entretenido.

 Five Nights at Freddy en comparación es la versión Nickelodeon destinada a un público pre-adolescente.

Entre los aspectos positivos se puede destacar la participación de Mary Stuart Masterson (recordada actriz de Tomates verdes fritos) quien parece haber sido la integrante del reparto que más se divirtió durante la filmación.

Cabe resaltar también la labor del Jim Hemson´s Creature Shop que hizo un gran trabajo con las marionetas electrónicas.

También sobresale la labor en los campos del diseño de producción y fotografía que contribuyeron a brindar algunas ambientaciones interesantes.

Lamentablemente la trama y el tratamiento de los contenidos de terror para el público que no es fan de los juegos termina siendo penosamente insulso, un tema que suele ser moneda corriente en las producciones de Blumhouse.