Nota de Hugo Zapata

Este año Dick Tracy se suma al club del 30 aniversario y es una gran oportunidad para recordar a una de las mejores adaptaciones que se hicieron sobre un cómic en el cine.

Son esa clase de propuestas donde las viñetas de la historieta cobraron de vida de un modo perfecto, dentro en una producción que le hacía justicia a la emblemática creación de Chester Gould.

La mayor contribución de esta película pasó por acercar a este ícono del género policial a una nueva generación de lectores de cómics y espectadores que en 1990 no estaban familiarizados con el personaje.

Si bien la obra de Gould nunca se dejó de publicar en los diarios norteamericanos desde 1931, la última aparición del personaje en el cine había sido en 1947.

Contra todos los pronósticos de los analistas de la industria, en 1990 Dick Tracy fue uno de los grandes tapados de la taquilla al recaudar más de 160 millones de dólares y conseguir siete nominaciones al Oscar, donde ganaría en los rubros de canción original, maquillaje y dirección de arte.

Warren Beatty capturó a la perfección la estética pulp de la historieta con un reparto memorable, que incluía numerosas estrellas en roles secundarios donde sobresalían los nombres de Al Pacino, Dustin Hoffman, Charles Durnning, Dick Van Dyke, Kathy Bates, Paul Sorvino, James Caan y Madonna. Pacino en una interpretación desopilante, que parodiaba a los gánsters del cine de los años ´30, fue nominado al Oscar como Mejor Actor de reparto, donde perdió en la competencia con Joe Pesci, por su por su interpretación de Tommy DeVito en Buenos Muchachos.

Casualmente otro mafioso que tuvo una enorme popularidad durante la temporada de estrenos de 1990.

A continuación repasaremos algunas curiosidades y virtudes relacionadas con esta gran película que en lo personal considero entre mis favoritas del género.

SUPERMAN HIZO POSIBLE EL REGRESO DE TRACY

La realidad es que el detective de Chester Gould había quedado por completo en el olvido en Hollywood hasta que la primera película de Superman, de Richard Donner, en 1978 consiguió darle notoriedad otra vez a esta clase de propuestas.

Antes de la aparición del Hombre de acero en la pantalla grande Warren Beatty había intentado sacar adelante esta producción en varias oportunidades pero su idea fue rechazada por todos los grandes estudios.

A partir del suceso de la obra de Donner, United Artist consideró hace el film con el guionista de Superman, Tom Mankiewickz. Sin embargo todo quedó en la nada cuando el estudio se negó a darle participación al creador de Tracy.

Durante los años ´80 Beatty, quien era un fan apasionado del cómic, nunca abandonó el proyecto y eventualmente compró los derechos del personaje por 3 millones de dólares.

En algún momento Universal también estuvo cerca de hacer el film con Steven Spielberg pero la producción nunca se llegó a concretar.

En 1989 Joel Silver (responsable de la saga Arma Mortal) tomó la posta con Walter Hill como director, quien venía de estrenar Infierno rojo con Arnold Schawarzenegger.

La producción no llegó a prosperar debido a que el cineasta y Beatty tenían visiones extremadamente opuestas sobre cómo debía adaptarse el personaje. Hill quería hacer un film del género gánster, con secuencias de acción violentas (algo que más tarde concretaría en Last Man Standing, con Bruce Willis), mientras que Warren buscaba darle una impronta más comiquera y aprovechar todos esos villanos grotescos de Chester Gould sin que la trama fuera tan seria.

Los artistas no se pusieron de acuerdo y Beatty consiguió la bendición de Disney con la condición que no sobrepasara el presupuesto destinado de 25 millones de dólares, algo que ocurría menudo en las películas que dirigía el artista.

Al final Dick Tracy terminó por costar 101 millones dólares debido a una ambiciosa campaña de marketing que tenía el objetivo de instalar otra vez este personaje en una nueva generación de espectadores.

LA FOTOGRAFÍA DE VITTORIO STORARO

Uno de los grandes aciertos de este film, a la hora de capturar el espíritu de aventura pulp, residió en la excelente colaboración que se gestó entre Beatty y el director de fotografía, Vittorio Storaro.

Probablemente uno de los más grandes artistas dentro de este campo en los últimos 50 años, quien por entonces ya cosechaba tres premios Oscar por su labor en Apocalipsis Now! (1979) Reds (1981 y El último emperador (1987).

En Dick Tracy supo desarrollar a la perfección la visión del director, cuya finalidad era generar la fantasía que las viñetas del cómic habían cobrado vida en la pantalla grande.

El modo en que trabajó la iluminación de la ciudad de Chicago y los escenario en interiores, sumada a la saturación de los colores primarios generaron que la película tuviera una identidad visual muy especial que no tenía antecedentes en este género.

A menudo en los medios de prensa se suele remarcar la influencia del Batman de Burton en esta cuestión cuando no tuvo nada que ver.

La película de Warner se desarrollaba en esos ambientes góticos y oscuros que son propios del arte del director, mientras que Beatty y Storaron tuvieron la intención de recrear en el cine el cómic en colores de Dick Tracy.

Tal vez cierta similitud en las melodías de Danny Elfman contribuyó a esta asociación pero son dos visiones artísticas completamente diferentes.

LA SUBESTIMADA CONTRIBUCIÓN DE MADONNA 

Una particularidad de esta producción, que no se volvió a repetir en otra película del género, es que la trama incluía la participación de 21 villanos clásicos del cómic.

Entre ellos sobresalía la femme fatale, Breathless Mahoney, un papel para el que se consideraron en un principio cuatro actrices: Sharon Stone, Michelle Pfeiffer, Kathleen Turner y Kim Basinger.

Madonna por entonces venía de una serie de frustraciones con sus incursiones en el cine y cuando se enteró del proyecto le rogó a Beatty y los productores del estudio que le dieran el papel.

El problema era que en Disney no la quería por su imagen polémica y Warren prefería a otras actrices más conocidas. La cantante entonces les hizo una oferta que no pudieron rechazar. Si le daban el rol de Breathless ella se comprometía a promocionar la película en su gira mundial The Blond Ambition Tour con números musicales inspirados en Dick Tracy.

De ese modo el estudio capturaba la atención de un público que no tenía la menor idea de la existencia del detective.

La cantante finalmente obtuvo el rol pero le pagaron un salario mínimo de 1440 dólares por semana. No obstante, Madonna luego tuvo un porcentaje de la taquilla y las regalía de la banda de sonido.

Más allá que a cantante resultó la elección perfecta para el rol y brindó una muy buena interpretación, su participación arrastró muchísimo a los cines muchísimos espectadores que de otro modo no se hubieran interesado por esta propuesta.

LOS TRES DISCOS DE DICK TRACY

Debido a que este héroe de los cómics había quedado en el olvido en la década de 1990, Disney organizó una campaña de marketing muy ambiciosa para instalar al personaje otra vez en el mercado.

Además de una serie de video juegos, línea de juguetes, productos de la Cajita Feliz de McDonalds también se editaron tres bandas de sonido.

Algo impensable de concebir en la actualidad.

El público pudo optar entre la música instrumental de Danny Elfman, el disco de Madonna, I´m Breathless, que resultaría una gran colaboración con el compositor Stephen Sondheim, y un álbum adicional con canciones inspiradas por el film, donde participaron el grupo Erasure, K.D.Lang, Ice T, Brenda Lee y Jerry Lee Lewis.

El de Madonna obviamente fue el más popular y la valió a la artista un premio Oscar a la Mejor canción original por el tema Sooner o Later.

EL CORTO DE ROGER RABBIT 

Debido a que la obra de Beatty presentaba 27 personajes que morían de un modo violento, Disney estrenó el film bajo el sello Touchstone Pictures que se había concebido con esos fines.

Con el fin de atraer la atención del público infantil el estudio de animación creó un corto especial con Roger Rabbit para exhibirlo antes de la película.

Roller Coaster Rabbit tuvo una excelente repercusión y cumplió con los objetivos del estudio. En el siguiente video lo pueden disfrutar completo.

LA CONTINUACIÓN FRUSTRADA Y EL ESPECIAL DE 2008

Aunque a Dick Tracy le fue muy bien en la taquilla los números no convencieron lo suficientemente a los directivos de Disney para desarrollar una franquicia.

Warrent Beatty intentó hacer una continuación, cuya trama se ambientaría en la Segunda Guerra Mundial, pero el proyecto no prosperó debido a un interminable litigio judicial por los derechos del personaje con la compañía Tribune Media Service que publicaba la historieta.

En el 2008 para retener los derechos de cine el artista filmó un especial con el director de fotografía Emanuel Lubezki y el crítico de cine Leonard Maltin donde volvío a interpretar al detective en un material bastante bizarro que está disponible en You Tube.

Durante una convención de cómics en el 2016 Beatty anunció que deseaba hacer la continuación de Tracy pero la noticia fue tomada sin mucho entusiasmo debido a la edad del actor, quien este año cumplió 83 años.

De todos modos nos queda el recuerdo de la original, que pese a tener algunos problemas de guión, todavía sobresale entre las mejores adaptaciones realizadas sobre un cómic.