Fuentes de la industria confirman que se desprenderían de un complejo

Ya van dos años desde que Cinemark compró Hoyts, y todavía esto no fue aprobado por el organismo nacional que se ocupa de analizar cuestiones de competencia. 

Esta demora es algo normal. Cuando Bimbo compró Fargo tardaron 8 años en aprobarlo... por lo que los dueños de Cinemark pueden sentarse cómodos en Dallas a esperar la resolución. 

Nadie espera que pongan objeciones grandes, porque Bimbo pasó a tener más del 60% del mercado con esa compra o Clarín al comprar Fibertel y ser autorizado por este mismo gobierno, también tuvo una posición más que importante. 

No es el caso de Cinemark y Hoyts que juntas llegan al 40% del mercado en venta de entradas. 

Pero... fuentes de distintas cadenas de cine y distribuidoras, dicen que para agilizar la aprobación, la empresa vendería uno de sus 20 complejos, para evitar objeciones. 

Hay una sola zona en el Gran Buenos Aires donde podrían objetar una posición dominante desde el organismo anti monopolio, y uno de esos dos cines "en conflicto" sería vendido antes de fin de año. 

¿Cuál es el complejo? Para evitar trabas no se publica.

¿Quién lo va a comprar? Ningún cine ha reconocido oficialmente negociaciones, pero si al menos dos empresas son las que se rumorean que pueden hacerse cargo.

¿Tendremos noticias antes de fin de año? Eso es lo que dicen.

La buena noticia para Cinemoyts (nombre ficticio inventado por este sitio) es que luego de esta venta, no habría objeciones posibles a la compra, y eso permitiría la aprobación gubernamental. 

Una vez aprobado esto, Cinemark y Hoyts, ya como una misma empresa, pero manteniendo las dos marcas, tendría vía libre para crecer con nuevos complejos o ampliaciones de los actuales. 

Cinemark viene de un gran revés en México, donde el gobierno no le permitió vender sus complejos a Cinemex. El gobierno azteca argumentó que eso le daría mucho más poder a la empresa mexicana. En ese país Cinépolis y Cineméx tienen juntas más del 80% del mercado. Si bien Cinemark tenía una participación menor, ahora tendrán que buscar otro comprador. 

Este freno complicó a Cinemark no solo por no poder tener los ingresos esperados por la venta en si, si no que además los obligó a digitalizar los 31 complejos de la compañía en el país. 

Esta obligación surge de las negociaciones de la cadena con las distribuidoras más importantes, donde estas pagan un "print fee" por cada estreno digital, pero que es parte de una negociación global con metas en el tiempo, como bien confirmó un importante distribuidor en la Argentina a esta web.

No por nada Hoyts y Cinemark en la Argentina terminarán 100% digitales en las próximas semanas. Es parte de esas metas previstas.

Quizás por esto también se acelere la venta de este complejo en la Argentina, y así poder lograr una buena noticia para la compañía, luego del sopapo mexicano de hace unos meses. 

Se mantendrán informados los lectores como es habitual.