Es un guión más teatral que para la gran pantalla, de esa manera los enredos hubiesen sido más creíbles y disfrutables, para el vértigo del cine parece que nunca arranca, se torna lenta y predecible en los chistes. Excelentes interpretaciones.

Disfruté mucho viéndola. Me hizo reír en un par de ocasiones. La ví para pasar el rato y me sorprendió gratamente. Recomiendo.

Tiene algunos momentos divertidos, pero la historia es un poco enrevesada y algunas actuaciones no son creíbles, sobre todo la de Belén Rueda. Su personaje es el que complica la historia, por lo cual es el de mayor peso y el que más matices debería tener, pero es inevitable darse cuenta cuándo está fingiendo dentro de la trama. Si el espectador lo nota, resulta increíble que los personajes no lo hagan.

En general me gusta mucho el cine español, no es el caso de esta película, presuntamente una comedia que me hizo recordar al cine argentino de los 80 de Mingo y Anibal. Actuaciones correctas, flojo guión.