La traviesa hada de los dientes es una producción independiente alemana exclusivamente dirigida a los niños más pequeños de entre cuatro y siete que disfrutarán  esta propuesta.

Quienes superen esa edad probablemente sentirán más atracción por las Tortugas Ninjas.

La trama se relaciona con la leyenda del hada de los dientes que en Latinoamérica nunca tuvo cabida debido al que el territorio lo tiene monopolizado el Ratón Pérez.

Otro personaje del folclore europeo que se instaló en esta región con la inmigración española e italiana.

La película de Caroline Oringer elabora una aventura sencilla con un marcado perfil ecologista retro que remite a las propuestas de los años ´90, cuyos mensajes todavía tienen vigencia en la actualidad.

A través de una puesta en escena colorida el film captura la atención de los niños y consigue desarrollar un espectáculo ameno sin demasiadas pretensiones.

Un detalle interesante es que la trama retrata las nuevas conformaciones de los núcleos familiares, donde la protagonista debe adaptarse a la nueva pareja de su madre que además tiene dos hijos.

Un elemento que no solemos ver tan a menudo en esta clase de propuestas.

Para tratarse de una producción que manejó un presupuesto mucho más reducido al que suelen tener los títulos de los grandes estudios de Hollywood el resultado final de la obra alemana es más que decente.