Gran Turismo se suma al selecto grupo de las adaptaciones de videos juegos decentes gracias a la dirección de Neil Blomkamp, quien optó por desarrollar un drama deportivo sobre el automovilismo en lugar de un comercial del producto de Playstation.

El realizador de Distrito 9 en esta oportunidad incursionó en un género diferente para narrar la historia de vida de Jann Mardenborough, el gamer que se convirtió en piloto profesional y trascendió como una figura de la escudería Nissan,  donde llegó a competir en las series GP3, la Fórmula 3 y las 24 horas de Le Mans.

 El film incorpora de un modo muy original numerosas referencias al juego dentro de un relato que se enfoca más en el drama humano y el ambiente de las carreras de autos.

El director consigue aprovechar las figuras del reparto secundario donde sobresalen Orlando Bloom, Djimou Hounsou (el hombre que no envejece desde 1999) y muy especialmente  David Harbour, quien está fantástico en el rol del entrenador de pilotos.

 Archie Madekwe, el protagonista, no es un muchacho que destile precisamente carisma pero ofrece una interpretación correcta en el rol principal gracias a los artistas más conocidos que lo rodean.

Lo genial de Gran Turismo pasa por el hecho que Blomkamp concibió un espectáculo para ser disfrutado exclusivamente en una pantalla de cine, ya que a través del consumo hogareño el atractivo de esta propuesta se diluye considerablemente.

Blomkamp le aporta emoción a las secuencias de las competencias que se ven beneficiadas por  los efectos de sonido y la música de Lorne Baffle, discípulo de Hans Zimmer, quien es más conocido en el campo de los videos juegos por su labor en las franquicias Call of Duty y Assassins Creed.

En el acto final el cineasta se mete en un terreno sagrado con la secuencia de las 24 horas de Le Mans, una carrera que quedó inmortalizada en la obra maestra de 1971 gestada por Steve McQueen.

El clímax de Gran Turismo aborda el legendario circuito francés con mucha dignidad donde se retrata el contexto moderno de esa competición.

No sé si es una película que enganchará a todo el mundo, especialmente en la prensa, pero si te atrae la temática o el género reitero la recomendación de verla en el cine ya que es el formato ideal para disfrutar sus virtudes técnicas. 

Dato Loco: La madre del protagonista es interpretada por la ex Spice Girl, Geri Halliwell, quien actualmente está casada con Christian Horner, manager de la escudería Red Bull en la Fórmula 1.