El secreto de la vigencia de las Tortugas Ninjas durante más de 30 años reside en que los productores de la franquicia supieron reinventar los personajes con el paso de los años para acercarlos a las nuevas generaciones.

La última entrega, Caos mutante, es un reboot de animación exclusivamente dirigido a niños de entre cinco y diez años que nunca vieron a estos héroes en la pantalla grande.

Tenía mis dudas con esta propuesta al tratarse de un proyecto del actor Seth Rogen , quien ya había hecho un desastre con la adaptación del Avispón Verde.

Obviamente lo peor del film se relaciona con su labor en el guión, que escribió junto a otros cuatro inútiles que descubrieron a las tortugas por el perfil de Wikipedia, sin embargo es justo mencionar que el espectáculo resultó menos catastrófico de lo esperado.

Una enorme debilidad de este relanzamiento es que se trata de una obra que termina prisionera de la agenda de moralidad que prima en los contenidos actuales de Hollywood.

Por consiguiente, los villanos clásicos en el 2023 ya no pueden ser malos y hay que redimirlos con alguna excusa mientras que los protagonistas tienen otros objetivos para sus vidas.

A las nuevas tortugas ya no les interesa tanto convertirse en guerreros de elite ninja para combatir el crimen sino poder asistir a una escuela secundaria con el fin de ser aceptados en la sociedad humana.

La mayor debilidad del argumento es que Rogen y su equipo de guionistas despojan a los protagonistas de aquellos rasgos individuales que le aportaban matices interesantes a sus personalidades.

En esta película todos tienen el mismo carácter  y hablan como adolescentes genéricos que por alguna razón es la gran novedad que aplaudió la prensa norteamericana.

El maestro Splinter dejó de sobresalir como el gran sensei de las artes marciales para ser  retratado como un padre mundano de una típica sitcom.

La pobre April O´Neil se llevó la peor parte y aquella heroína autosuficiente que en el pasado seguía con sagacidad los temas que investigaba ahora es una víctima de la ansiedad social.

Una burda excusa para que el comentario y la moraleja se imponga sobre el entretenimiento. 

En este relato encima le dieron una personalidad arrogante que la vuelve infumable a lo largo de la trama.

El guión también presenta un problema de identidad donde no queda claro el tono que buscaban darle al film.

Hay momentos serios donde se intenta abordar el género del coming of age que se contrastan con escenas cómicas bobas que supongo las incluyeron para que los niños no se duerman en la butaca.

En lo referido a las cualidades del film los laureles se lo lleva la realización del director Jeff Rowe (Mitchells vs the Machines) cuya labor sobresale en los aspectos visuales.

Caos mutante se impone como heredera de la impronta estética que estableció el Spiderverse con Miles Morales y que afortunadamente hoy los estudios de animación de Hollywood toman como influencia para nuevos proyectos.

En lo personal me gusta mucho esta fusión del CGI con la animación tradicional que rescata el espíritu artesanal del género.

Lo interesante del film es que la obra de Rowe no sale a copiar exactamente lo que hizo Sony sino que le imprime su propia personalidad en lo referido a la puesta en escena y los diseños de los personajes.

Cabe destacar también la sólida banda sonora de Trent Reznor y Atticus Ross y la musicalización con temas de rap que es el género tradicional con el que se asocia a los personajes.

La película en ese sentido es muy atractiva y tiene un ritmo narrativo dinámico para que el público infantil no se disperse.

No es un dato menor que el director consigue desarrollar el argumento en apenas una hora y media algo que dejó de ser habitual en el cine norteamericano.

Este proyecto tiene la función de presentar el piloto de la nueva serie animada de Nickelodeon que  tendría que funcionar con los más chicos.

En Estados Unidos le costó pelear en la taquilla y se cayó tras su segunda semana de exhibición pero las tortugas cuentan con un notable fandom internacional que será clave para el estudio Universal. 

Vuelvo a reiterar, para tratarse de una producción de Seth Rogen por lo menos se deja ver y es efectiva a la hora de entretener a los niños.