No es horrenda, pero si olvidable. Un buen laburo de Grandinetti, lindos paisajes y una escena de Marrale genial, pero no me engancharon los personajes, ni su quimica o sus problemas. El guión tiene un tratamiento bastante superficial de sus problemas y toma desvíos para forzar situaciones en los personajes para llevarlos del punto A al B sin que fluya. Morán lo intenta pero termino viendo más a la actriz que al personaje. La comedia zafa, pero los momentos sentimentales son clicheados y trata de apelar a una nostalgia que no siento ni me llega. Personalmente, la saltearía. He visto mucho peores, pero solo la recomendaría si no te quedan mas opciones para ver.

Que feliz que fui. No pretende nada más que pasarla bien y apelar a una nostalgia bonita y llenadora, con actuaciones que dan mucho pero más que nada Mercedes Moran que brilla en cada escena que está. Como diría mi abuela, que peli linda.