Criada por unos padres excéntricos que, a los 6 años, le diagnosticaron erroneamente un problema cardiaco, el contacto de Amelie con el mundo exterior se ha visto limitado desde pequeña.

Ante esto, Amélie desarrolla una gran imaginación. Después de que su madre muriera, y de que las tendencias antisociales de su padre se agudizaran, la joven, al cumplir los 22 años, decide independizarse. El día que muere Lady Di descubre tras una baldosa, escondida, una caja con juguetes y fotografías en su interior. Ante este descubrimiento, se propone encontrar a su dueño y devolvérsela.