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Cuando Sylvester Stallone escribió el guión de Rocky su fuente de inspiración fue la recordada pelea de Muhammad Alí contra Chuck Wepner en 1975.
Un desconocido pugilista de New Jersey que pasó a la historia por haber perdido con mucha dignidad frente a los grandes campeones de su generación como George Foreman y Sonny Liston.
Ejemplos como el de Wepner, que no hicieron una carrera memorable pero contribuyeron a que otros boxeadores ascendieran en su carrera, sobran en este deporte.
La película documental de Meko-Pura rescata el interesante caso local de Aníbal Disanti, un boxeador profesional que llegó a ser fondista del Luna Park en los tiempos de Perón y Evita y cuya pelea más importante la tuvo frente al gran campeón de aquellos años, José María Gatica.
Su carrera se vio afectada años después en un combate trágico que terminó con la muerte de su rival, un hecho que marcaría su vida.
El film aprovecha acertadamente un personaje muy rico que a través de su testimonio nos transporta a una época donde la sociedad se regía por otros valores y el mundo del boxeo era muy diferente al que conocemos en la actualidad.
Disanti se desenvuelve con mucha naturalidad frente a las cámaras y a través de sus palabras deja lecciones de vida muy interesantes. Pese a su origen humilde, donde tuvo que lidiar con numerosas limitaciones, siempre se desempeñó con dignidad en todas las ocupaciones que emprendió.
El boxeo suele estar asociado a nivel popular con la marginalidad y el destino trágico de los boxeadores. Si bien Disanti en su carrera tuvo que atravesar una situación traumática fuera del ring su historia fue muy diferente.
Un hombre muy lúcido cuyas anécdotas tienen un valor enorme y que esta película documenta con un relato muy ameno.
La historia de Disanti se complementa con material de archivo, recreaciones de ficción y el testimonio de quienes llegaron a conocerlo de cerca.
El boxeo argentino es una fuente muy rica de relatos interesantes pero son muy pocas las películas de ficción o documental que llegaron a explorar estos temas.
Aníbal, justo una muerte es una de las buenas y merece su recomendación.