El último filme de Robert Altman cuenta la historia de un ginecólogo de Dallas (Richard Gere) permanentemente rodeado de mujeres, tanto en su trabajo como en su vida privada.
En su profesión, el doctor es uno de los más reconocidos especialistas de la ciudad y su trabajo se acumula alarmantemente, muy a pesar de los esfuerzos de su asistente, Carolyn (Shelley Long).
Mientras tanto, en su vida privada los tiempos parecen no darle descanso, ya que Kate, su mujer (interpretada por Farrah Fawcett), está internada en un instituto psiquiátrico en un estado de infantilismo, mientras que una de sus hijas -Dee Dee (Kate Hudson)- ultima los preparativos para su inminente boda a pesar de sus tendencias lésbicas.
A ésto se suman su otra hija, Connie (Tara Reid), obsesionada con el asesinato de JFK, su cuñada Peggy (Laura Dern), que además de ser alcohólica se muda a su casa acompañada de sus tres hijas pequeñas.
Saturado, el Dr. T. es seducido por su instructora de golf (Laura Dern), su mujer le pide el divorcio, su enfermera jefe le desea, en su consulta reina el caos, se descubre explorando a la amante de su hija (Liv Tyler) y todo parece derrumbarse...