El cine muestra frecuentemente la dolorosa pobreza que abunda en los países periféricos. El Olimpo Vacío ahonda en las causas de la injusticia social en un país que, teniendo todo para progresar, está estancado en una historia circular. Sebreli se empeña en mostrar el lado incómodo: el apoyo civil a los dictadores, el nacionalismo ciego del fútbol, el entusiasmo por una guerra absurda. Momentos de locura colectiva que la sociedad de hoy prefiere olvidar y que Sebreli proponer revisar.