Dos primos se vuelven a ver luego de un tiempo, para asistir al velorio de su abuelo, en Villegas, lugar en el cual fueron criados ambos y abandonaron cuando partieron hacia capital. Auto mediante, comienzan el viaje que permitirá que el bohemio Pipa y el aburguesado Esteban comprueben que los sentimientos se mantienen vivos a pesar de todo. Matices que se esfuman entre lo pueblerino y lo capitalino, lo moderno y lo antiguo, lo real y lo ideal, logran una pintura digna de ser enmarcada. Los paisajes naturales, fieles a las costumbres argentinas, a la vida del laburante de campo, hacen una exquisita combinación con la musicalización. Las actuaciones de Lamothe y Bigliardi perfectas.