A Una de las mayores injusticias que he visto últimamente en el cine se llevó a cabo con esta película. En primer lugar los avances la venden como una historia de fantasía estilo Narnia, La Brújula Dorada o Harry Potter, que es cualquiera porque este estreno está bastante alejado de esas historias. De hecho, cuando se estrenó en Estados Unidos, los realizadores se quejaron en los medios de prensa por esto. Encima en Argentina la distribuidora UIP, que otra vez vuelve estrenar una película de target juvenil con todas las copias en castellano, le puso un título digno de un programa de Baby TV. El Mágico Mundo de Terabithia es una coproducción entre Disney y la productora Walden Media (responsable de Narnia) y adapta la novela Bridges to Therabithia (1977) de Catherine Patterson que no forma parte de ninguna saga fantástica.. Es una historia sobre una etapa conflictiva (al menos para mí lo fue) de la vida como es la pre adolescencia en la que uno se enfrenta a muchísimos cambios importantes. Y claro, también trata sobre la amistad. Realmente no podían haber elegido un director mejor para contar esta trama en el cine que el maestro Gabor Csupo, quien fue responsable del éxito arrollador que tuvo Nickelodeon en la década del ´90 en la televisión. Junto con su esposa Arlene Clasky y un amigo de la pareja, Dan Germain, crearon a Los Rugrats, que en mi opinión es una joya en lo referente a productos infantiles originales. Esas historias de bebés, que solían tener muchos guiños a los adultos, algo que Csupo aprendió a desarrollar en Los Simpsons, sobresalieron artísticamente y facturaron millones debido a que el director sabe conectarse con los chicos y por lo tanto no tiene problemas para llegar a ese público cuando trabaja en un proyecto dirigido a ellos. Este es su debut en el cine de acción en vivo con actores donde brindó un film muy emotivo sobre el poder de la amistad. Los elementos fantásticos que aparecen en esta historia forman parte de la imaginación de los protagonistas que crean un mundo de fantasía para escapar de los problemas que los afectan en la realidad. La trama combina la fantasía con la realidad de un modo muy parecido a lo que hizo Guillermo Del Toro con El Laberinto del Fauno. Si bien los efectos especiales están buenos y hay un gran trabajo de fotografía en las escenas que transcurren en el reino imaginario de Terabithia, la película sobresale por el trabajo de los jóvenes protagonistas y un director que supo retratar a la perfección los conflictos que viven los chicos en una etapa de alta sensibilidad como es la pre adolesencia. Esta película me movilizó de manera especial debido a que viví una experiencia similar a los 12 años como la que le sucede al protagonista en esta historia y fue loco revivir aquel momento después de tantos tiempo viendo un película, que en principio, pensé que iba a ser otra historia de fantasía para chicos que intenta repetir el éxito de Harry Potter. No puedo adelantar nada, pero quiero dejar en claro que desde lo emocional Therabithia me pareció un películón y es por lejos el film de acción en vivo más dramático en la historia de Disney. Esto no es Encantada, que quede claro. Además deja un mensaje a los chicos importante sobre el hecho de trabajar la imaginación y jugarse por el arte que les guste. En estos tiempos donde muchos pibes de 12 años (espero que mi primo lea esto) parecen zombies que no conocen otra vida fuera del Playstation y los estúpidos juegos de los teléfonos celulares está bueno que se estrene un film que apueste a la imaginación y los aliente a expresarse artísticamente de la manera que quieran. Mis felicitaciones para el director Gabor Csupo y este excelente debut en la pantalla grande fuera de la animación. El Mundo Mágico de Terabithia es una gran película para disfrutar en el cine.