Originalmente, la historia de esta comedia romántica data de los años cuarenta y cincuenta, que en su época fue protagonizada por Katherine Hepburn y Spencer Tracy. Pero ahora, la cuestión es diferente. Dos abogados expertos en derecho de familia de Nueva York compiten dentro de su campo profesional. Pero un día les cambia sus vidas. Uno de ellos es contratado para anular su propio matrimonio.
Dos famosos abogados matrimonialistas (Pierce Brosnan y Julianne Moore) de Nueva York, que se enfrentan a diario en los tribunales y que no se soportan, acaban, tras una noche de borrachera, casados. Todo esto sucede justo en medio de uno de los juicios de divorcio más famosos de todos los tiempos y del que ambos son abogados y parte contraria.