En el Estados Unidos contemporáneo, donde la familia promedio cuenta con 1.87 hijos, Tom Baker (Steve Martin) y su esposa Kate (Bonnie Hunt) han decidido que la vida es mejor —si no es que más barata— por docena. Los Baker viven en un pequeño poblado de Illinois donde Tom es entrenador del equipo de fútbol americano local. La vida diaria de la familia cuenta con cantidades similares de amor y de caos... el tipo de caos de cuando tu mascota, una rana, cae accidentalmente en tu desayuno. Cuando a Tom le ofrecen un trabajo de ensueño —entrenar a un equipo de una gran universidad— él y Kate se ven obligados a mudar a la familia, ante el desagrado de los 12 niños. Al mismo tiempo, Kate se entera que sus memorias están a punto de ser publicadas. Su agente se la lleva abruptamente a Nueva York para promover su libro, dejando a Tom solo para que se encargue de una familia que cada vez está más enfadada y desorganizada, y de su exigente trabajo nuevo. Con toda la locura que se vive en casa, Kate de viaje y el trabajo de Tom en peligro, la familia Baker finalmente decide no tenerlo todo, y amar lo que sí tiene.