Las películas del oso Paddington trascendieron entre las propuestas más destacadas que brindó el género infantil en la última década.

Las primeras dos entregas, estrenadas en el 2014 y el 2017, le hicieron justicia a la creación de Michael Bond bajo la producción de David Hayday y la dirección de Paul King.

Lamentablemente los realizadores originales se desvincularon del nuevo film, ya que se concentraron en el proyecto de Wonka con Timothée Chalamet, y esto afectó el contenido de la tercera parte.

Paddington en Perú no es para nada un film mediocre pero se encuentra muy lejos de la jerarquía artística que tuvieron los episodios previos.

Parte del atractivo de esta saga residía en la interacción del protagonista con la sociedad inglesa y en especial los miembros de la familia Brown que lo adoptaban en Londres.

El nuevo film narra una aventura mundana del oso en las junglas de Perú y aunque el espectáculo consigue ser ameno perdió el encanto que primó en las primeras películas.

El mismo argumento se podría haber narrado con Alvin y las ardillas y daba lo mismo porque el contenido es muy diferente a los trabajos que brindaron Heyday y King.

Dentro del reparto secundario se siente muchísimo la ausencia del Sally Hawkins, quien tenía interacciones divertidas con el oso.

Entre las nuevas incorporaciones Antonio Banderas se carga el film al hombro y consigue hacerlo llevadero con una participación simpática.

Otra debilidad notable se relaciona con los campos técnicos donde los efectos digitales se presentan un poco más descuidados.

Aunque consigue ser entretenida para los chicos resulta imposible ignorar el cambio que hubo en el equipo de producción.   

En resumen,  Paddington en Perú zafa para una salida familiar si bien no está a la altura de las películas anteriores.